93 x Hablamos de la “no-reforma” sobre “okupación”, y la razón por la que todo va a seguir igual 3d324c

Buenos días, buenas tardes, buenas noches, buenas madrugadas. Como estoy contándolo en cada programa, pues este es el programa, si no me equivoco, número, número 93. Así que nos queda poco para acabar la primera temporada y tenemos aquí a mi buen amigo y gran activo de esta casa como es Alberto Castillo, que ha habido que grabar hasta un sábado porque tiene una agenda que ya quisiera volaños tenerla.

Y volaños porque es el que nos jode el ordenamiento jurídico, básicamente. Bueno, queda la cara. ¿Qué tal, Alberto? ¿Qué tal, Miguel Ángel? ¿Cómo estás? Muy bien. Lamentablemente la agenda de esta semana no era por cosas entretenidas, sino por cuestiones médicas. Bueno, bueno. Lo tenemos un poco... Hemos grabado el sábado por ese motivo. Lo tenemos un poco pachucho.

Yo que lo conozco, tomando Paulaners, al parecer ahora estaba tomando un plátano por el potasio.

Imagínate cómo está la cosa. Y agua. Y un botellín de agua, efectivamente. Y un botellín de agua. Bueno, pero bueno. ¿Qué te voy a contar yo del tema? Si he tenido un montón de achaques y de todo. Estamos en una edad jodida, que tú eres de mi quinta.

Hay que cuidarse ya, eh. Sí, es que está feo esto decirlo. Igual me he pegado dos hostias, pero los 50 están ahí. O sea, no es por nada. Lo tengo perfectamente desmovido, vamos. Sin ningún tipo de problema. Los 50 están ahí. Es una edad muy jodida. La crisis de los 40 no la sufrí, pero la de los 50 no sé si me acabaré comprando... Bueno, es un poco chapa y pintura. Tampoco hay que preocuparse demasiado. No sé. Yo me veo muy mal porque ya estoy mirando coche. O sea, que en el momento te digo más. O sea, igual que hay coche.

Eso sí, mientras no sea descapotable y biplaza no va a pasar nada. Pero bueno, antes de meternos en harina, que va a estar muy interesante yo creo el programa de hoy. Vamos a intentar que sea didáctico y con independencia de los insultos a los políticos que competa.

Pero te voy a sacar una cosa que sabes que no sabías que te iba a sacar. Oye, no te has enterado. La actualidad, la actualidad. ¿Tú sabes que se han entregado los premios Economy Saint-Juris este viernes pasado? No. ¿No? No, no. ¿Pero no te lo han revistado? Eso sí. Hombre, sí. ¿Y los premios? ¿Pero no te los premios? Sí, esta edición no, pero los premios sí. ¿Ah qué? Por ediciones anteriores. ¿Ah que han sido ediciones anteriores? No, no, no ha ido jamás. Ah, vale, vale.

He dicho que lo conozco. Igual que otro tipo de premios. Si me dices que ha sido edición anteriores, me jodías toda la hostia que iba a meter. Nada, nada, nada. Puedes lanzarla con absoluta tranquilidad, aunque hubiera ido, vamos. No es que venía yo para acá para grabar y digo voy a ver la actualidad jurídica porque hombre, pues hay que meter alguna hostia y tal. Y digo, joder, se han entregado los premios Economy Saint-Juris. Bueno, un despliegue de fotos, una cosa. Parecía aquello Los Goya.

Pero en plan… Bueno, iba a decir en plan serio, igual no. Pero bueno, parecía Los Goya aquello. Bueno, con un fotocall, con unas cosas y tal. Y entonces empecé a ver las fotos de los premios. No me entré en los premiados, que quede claro. Solo hablo de las fotos. No sé quién premiaron y quién no. Y me importa un pimiento, sinceramente.

Y joder, macho. Esto parecía una pasarela de Twitter. Y digo, pero si están todos los tuiteros aquí. Pero todos, todos, todos, todos. ¿Habría algún premio al mejor tuitero? Bueno, algún barra… Alguna tuitero barra tuitera yo hasta he dejado al niño en casa.

O sea, una cosa… Me he quedado flipado. Entonces, claro, yo me pregunto si para acudir a ciertos premios uno tiene que tener una cuenta de Twitter muy activa. Y ese es todo el mérito. Igual es un nuevo premio que dan y no lo sabíamos. No, no, pero igual son invitados y tal. Pero bueno, no sé. Señores de Economy Saint-Juris, yo solo he ganado siete casaciones en mi vida. No sé si… Claro, me faltan tuits. Eso es cierto. Me faltan tuits.

Para el próximo. Para el próximo. A ver si me invitan, hombre.

¿En este tiempo? No sé, no sé. He hecho grandes aportaciones al ordenamiento jurídico de este país. Tengo hasta libros escritos, no coordinando, para que los hagan otros. Y en editoriales de primer nivel. No sé, me llama la atención.

Pero ¿no te han escrito ellos para que pudieras presentarte? No, no, pero sí. Yo no sabía ni qué eran estos premios. Yo lo he visto ahora por internet y bueno, la coña la hago. Los coyentes nuestros saben por dónde va la hostia y los que no pues me perdonan. Pero la coña la hago porque digo, joder, es que parece, macho, que hay que tener Twitter, o sea, hay que ser chachi guay y cosas así. Esto me preocupa, ya fuera de bromas, a nivel de Madrid, porque yo creo que esto solo pasa en Madrid. A mí me preocupa que empiece el cliente barra consumidor a entender que…