Ep.3 MARTA PASTOR BERMÚDEZ "KA LI BRE". DISEÑADORA DE TATUAJES Y PINTORA. 1f6o5l

Tatuarse es una expresión artística que ha existido durante miles de años, una expresión corporal que marca la cultura, la identidad y las emociones de quien lleva el tatuaje impreso en su piel. Para muchos un tatuaje es mucho más que una simple imagen o símbolo, es una historia, una declaración personal o quizá un modo de conectarse con el universo.

Hoy tenemos con nosotros en entrevista con la vida a Marta Pastor Bermúdez, más conocida como Calibre en el ámbito del diseño de tatuajes y también como tatuadora. Marta estudió bachillerato de Artes, es graduada en Bellas Artes en la Especialidad de Obra Gráfica por la Universidad Complutense de Madrid. También estudió introduciéndose en la pintura realista en el estudio del pintor Joaquín Risueño, uno de los grandes pintores de nuestro panorama artístico contemporáneo. Con ella vamos a charlar acerca del tatuaje y más concretamente del tatuaje simbólico. Buenas tardes, Marta.

Buenas tardes, Luis. Muchas gracias por estar hoy aquí con nosotros.

Muchas gracias a ti por la invitación. Yo quería preguntarte en primer lugar, ¿cuánto hace que has abierto tu estudio dedicado al tatuaje simbólico? Bueno, pues la verdad que ahora ha cumplido poco más de seis meses, desde que se abrió Banyara y bueno, nace como una propuesta un poquito distinta, ¿no? También dentro de lo que es Cercedilla, nunca había habido un estudio de tatuaje anteriormente y bueno, ha sido un camino la verdad que bastante largo llegar hasta aquí y al crear este proyecto que tenía la verdad mucha ilusión y el que se ha ido forjando a lo largo de los años y en el cual, pues un año después de haberlo empezado a crear, pues hoy en día ya está.

Como una meta conseguida, ¿no? Efectivamente.

Claro. ¿Cómo me has dicho que se llama el local? Banyara, ¿no? Eso es.

Y si quieres decirnos dónde está ubicado, eso ya como tú quieras, para que los oyentes lo sepan.

Pues el local está ubicado en el municipio de Cercedilla, en la zona de la estación, en la calle Emilio Serrano número 26. Es un local.

Bueno, yo invito a todo el mundo a que visite el local, que yo lo he visto además y es maravilloso.

Y no solo eso, sino que visite Cercedilla porque también es maravilloso. O sea, que te iba a preguntar, ¿qué hay que hacer para pedir una cita a un tatuador? En tu caso, por ejemplo, ¿cómo se puede ar contigo? Bueno, hay diferentes formas de ar con los artistas, con los tatuadores. Ahí ya varía un poco. Depende de cómo prefiera cada uno, ¿no? Porque, bueno, tú puedes pedir una cita con un tatuador y a lo mejor lo que te redirigen es a su mail para ar con ellos, enviarles la idea, al WhatsApp. Hay gente que, como yo, por ejemplo, también utiliza un formulario. Entonces, bueno, hay diferentes fórmulas.

La idea principal es, sobre todo, que la gente sepa qué quiere hacerse, que eso es lo que nos tiene que llegar. La zona donde le gustaría tatuarse, si la tiene elegida. Y, bueno, dentro de la idea, del concepto y demás, hablar también, pues, un poco del tamaño, de referencias que tenga o bien suyas con un boceto, un dibujo, o bien de, pues, referencias visuales también de trabajos de los artistas, que esta parte también es muy importante. Muy bien. ¿Cómo comenzó tu interés por el tatuaje? Pues, realmente, este interés me vino un poco dado desde afuera, de rebote, porque, bueno, la idea es que realmente yo empecé a estudiar Bellas Artes desde que yo era muy pequeña.

Yo sabía que quería hacer Bellas Artes. Mi madre también, aunque no llegó a estudiarlo porque ella vivía en una ciudad de provincia donde no había facultad, bueno, pues, siempre me inspiró mucho en el amor que siente ella por el arte. Yo he vivido siempre rodeada de música, de arte, de pintura, gracias a ella. Y, bueno, yo siempre quería hacer Bellas Artes sin saber bien qué quería ser después, ¿no? Y la cosa, bueno, me vino un poco cuando ya estaba terminando la facultad. Yo estaba en ese momento, pues, bueno, pues estaba con una relación de pareja y esa persona me dijo, es que tú tienes que tatuar.

Me dijo, es que tú tienes que probar esto. Y el caso es que yo por ese entonces, yo no llevaba ni tatuajes, casi, vamos, me hice uno ya bastante mayor, de hecho. Y la verdad es que, bueno, cayó en mis manos un equipo de estos para probar, ¿no?, de principiante. Y, bueno, pues empecé así, poco a poco, probando con pieles sintéticas, piel de cerdo. Enseguida ya se lanzó y me dijo, venga, vas a tatuarme en la piel. Y, nada, fue bastante rápido, la verdad. Empecé ahí a practicar y demás. Y, bueno, pues por entonces, así fue como me ocurrió, ¿no? Le cogí mucho...