Episodio 90. Ayuno y niños 3cx4i

Bienvenidos a un nuevo podcast de carlos pérez regenera ayuno y niño un tema que me encanta poderlo poder compartir y poder dedicar aquí en este canal un espacio más extenso para poder hablar sobre ello me habéis preguntado muy al respecto y creo que es un tema muy relevante de mucha importancia de mucho valor y que quiero compartir con vosotros mi propuesta bien está claro que tenemos que contextualizar el proceso porque en definitiva cuando contextualizar vos y entendemos a donde queremos llegar a parar todo va cogiendo orden y ahí la respuesta casi que viene dada entonces claro es absurdo es absurdo date cuenta que es absurdo que tú le pidas a tu hijo que está pidiendo de comer no es que tengo hambre no vas a comer porque tienes que hacer horas de ayuno sea o porque te tienes que saltar esta comida o porque quiero que en una ventana de ocho horas y por lo tanto ahora no vas a comer claro eso es inviable es absurdo o sea el niño no está en disposición de entender esto ni ni lo entienden y es que lo tiene que entender ni se lo tenemos que hacer entender es un absurdo absoluto por lo tanto cuando me viene a la mente este título ayuno y niños que el título en si no se aguanta por ningún lado osea olvídate de decirle a tu hijo cuando te pida de comer que no va a comer porque está haciendo ayuno sea sería sería para mí irnos a un extremo que es completamente un absurdo absoluto que pasa aquí como siempre que lo que de lo que se trata es de lo que vamos a hablar ahora que es la contextualiza acción en relación a la forma de comer de la familia que eso es lo que el niño va a aprender que cómo vamos a explicar cómo debería de ser y a partir de ahí después si de manera natural como siempre damos el niño de das cuenta que ese día no he desayunado y que ha comido a la una y a las nueve de la noche y que ha hecho quince horas de ayuno este fantástico mira hoy mi hijo es verdad pues no ha comido en quince horas y está perfecto y acabado haciendo podremos decir así que acaba haciendo hay uno pero en los niños más que nunca acá término ayuno es que ni me gusta me gustaría más bien decir que el niño ha comido cuando ha tenido hambre y nuestro papel como educadores como cuidadores es generar un contexto un campamento base del niño pueda aprender a este proceso donde pueda familiarizarse con esto explicó cuando hablamos de niños tenemos que hablar de padres y cuando digo campamento base me refiero a ese hogar a esa familia a esa casa donde se hacen unas compras en el supermercado y donde hay una comida en los armarios y donde es muy habitual pues que el padre piense de una forma y la madre de otra y hayan todas estas complicaciones a la hora de de bueno de poder tener un proyecto común y de que el niño vea una coherencia y un sentido en la forma de hacer eso para mí es la parte determinante y absoluta eso es lo primero que tiene que haber sin eso no puede haber lo otro claro si un niño en casa hay dos cosas que tenemos que ver primero lo lo que hay de comer que hayan productos procesados etcétera y después la forma en como el la madre o el padre le va a estar insistiendo en lo que en que tenga que comer no entonces primero de todo si el niño se levanta por la mañana y puede comer productos procesados el niño para empezar ya no va a saber lo que es el hambre real sitúa al niño le vas a poner un vaso de leche con magdalenas eso podemos comer lo siempre que queramos vale voy a hacer a que un pequeño inciso para los que no lo sabéis que en esto he hablado mucho si tú eliges tu alimento alimento favorito y aquí cada uno de vosotros cada uno tu puedes decir oye pues en míos el bacalao el mío las gambas el mío el chuletón el mío te dije cuál es tu alimento favorito vale si tu ese alimento te lo comes dos veces al día para comer y para cenar a la que llevas veintitrés día estás cansado de tu alimento favorito y estar hasta las narices el chuletón vale y eso es una característica que tienen los alimentos y hace que el cuerpo pueda variar su forma de comer porque esa variación va a ser determinante para nuestra salud que tú