Extra - La verdad sobre John Titor, el primer crononauta de la red 175w3t

En el año 2000 un misterioso apareció en los tablones de anuncios de internet afirmando
ser un viajero en el tiempo. Se llamaba John Titor y sus mensajes describían un futuro devastador y
una misión secreta. ¿Fue un verdadero viajero en el tiempo o aquello tan solo se trató de un elaborado enganche?
Bienvenidos a Soles Lejanos 2.0, les habla David Minayo desde el lado oscuro del tiempo. Hoy
damos un paso especial, hoy empieza la versión en vídeo del podcast. Vamos a ver qué tal sale,
yo por lo menos estoy improvisando. Vamos a hablaros de John Titor, un crononauta que nació
casi a la vez que internet en esos foros precursores de lo que hoy conocemos como los
chats. No se vayan, quédense con nosotros porque la historia de hoy es sumamente interesante. Como
siempre, comenzamos. Para hablar de John Titor, primero debemos remontarnos al sistema BBS,
cuyas siglas significan Bulletin Board System. Un software ampliamente utilizado en Estados Unidos
durante los años 90, que permitía a los s conectarse a una red a través de la línea telefónica
para intercambiar información y participar en debates, funcionando como el precursor de los
foros de internet que hoy conocemos. Fue en este entorno, ya en declive en el año 2000,
cuando apareció por primera vez John Titor. Para entonces el BBS era considerado un sistema
obsoleto, pero hay que recordar que en aquella época comunicarse en línea no era tan sencillo
como ahora. Yo mismo, con 19 años por aquel entonces, tenía que desplazarme hasta el campus
de la Universidad Carlos III de Madrid, en Getafe, para conectarme desde la sala pública de
ordenadores. Esto que les cuento parece una batallita de abuelo, pero es así. Por aquel
entonces prácticamente nadie tenía internet en su casa. Respecto a John Titor, era uno de esos
s del sistema BBS que escribía con el apodo Time Travel-0. Su primer mensaje
documentado fue la descripción de las seis partes que una máquina del tiempo debería tener para
poder funcionar. Dos contenedores magnéticos para soportar las micro singularidades, un
distribuidor de inyección de electrones, un sistema de enfriamiento a través de rayos X,
un sensor de gravedad, cuatro relojes de cesio y tres ordenadores. Cualquiera de nosotros,
leyendo esto, podríamos pensar que estamos ante alguien que sabe de lo que habla, un científico
o incluso un verdadero viajero en el tiempo. Pero la realidad era que las descripciones de
Titor se correspondían con un modelo teórico ideado por Frank J. Tipler que se llama, en honor
a su padre, el cilindro de Tipler. Frank Tipler es un escritor y profesor de física matemática
estadounidense, nacido en 1947, cuyas teorías han sido calificadas por algunos de sus colegas
como pseudociencia. Una de sus ideas más llamativas, propuesta en 1974, es el concepto
del cilindro de Tipler, un modelo teórico que, de ser viable, permitiría los viajes en el tiempo.
Este concepto se basa en la relatividad general de Einstein y en la existencia de las llamadas
curvas cerradas de tipo tiempo, trayectorias en el espacio-tiempo que permitirían a un objeto
regresar al pasado. Según Tipler, si un cilindro de masa extremadamente densa y longitud infinita
girase sobre su eje a una velocidad cercana a la de la luz, generaría un campo gravitatorio tan
intenso que curvaría el espacio-tiempo a su alrededor, permitiendo que cualquier objeto que
se moviera en una trayectoria lo suficientemente cercana al cilindro siguiera un camino en espiral
hacia el pasado. Sin embargo, el modelo tiene limitaciones teóricas y prácticas. En primer
lugar, la idea de un cilindro de longitud infinita es físicamente inalcanzable. En segundo lugar,
cálculos posteriores han demostrado que el cilindro de Tipler no es un cilindro de masa infinita.