JUEGOS PERVERSOS - PARTE 1 6i3o37

Tus fantasías más prohibidas están aquí relatos calientes hoy presentamos juegos perversos parte uno un rayo iluminó el cielo por un largo instante seguido de un poderoso estruendo que hacía pensar que el mundo se iba a acabar lucía dio un salto y se sujetó con más fuerza del brazo de su marido asustada este la tomó de la mano y pese a la penumbra en que estaba sumida la habitación ella supo que le sonreía con ternura con la intención de tranquilizarla calma solo es una tormenta le susurró antonio al oído lucía era consciente de que no había nada que temer pero no podía evitarlo afuera parecía que se estuviera cayendo el cielo a pedazos el fuerte y constante ruido de las gotas de lluvia la asustaba y le traía viejos recuerdos de aquellas noches en que tanto su madre como su padre se iban a trabajar y la dejaban sola con su abuela quien nunca se preocupó mucho por calmar sus miedos de niña así que se quedaba en su habitación encogiéndose del espanto que la lluvia torrencial los truenos y relámpagos le provocaban no parece que vaya a parar pronto dijo una ronca voz masculina desde la ventana cerrando la cortina después de echar un vistazo afuera el apagón fue en toda la colonia no van a repararlo hasta que deje de llover sentenció una mujer lucía sintió su presencia detrás de ella había ido a buscar unas velas a otra habitación y ahora regresaba roger ven ayúdame con esto el hombre obedeció al instante se separó de la ventana y se acercó a la mesa de centro lucía sólo pudo oír el ruido que hicieron sus pasos y distinguir la silueta que vio pasar el lugar estaba completamente a oscuras la lluvia que comenzó como unas simples gotas se había intensificado tanto que no tardó en convertirse en tormenta eléctrica y entre tanta agua rayos y truenos un completo apagón los había sumido hace unos minutos en una total oscuro dad las dos personas que estaban encendiendo las velas para conseguir algo de luz eran rogelio y lorena el matrimonio dueño de la casa donde se encontraban y amigos de su esposo y de ella aunque en realidad era antonio quien los conocía desde su época de estudiante encendieron un par de velas y la sala donde se encontraban se iluminó tenuemente eso calmó un poco a lucía aunque no se separó de antonio sentirlo cerca era la mejor forma de tranquilizarse pronto rogelio y lorena encendieron más velas y la habitación se tornó algo más iluminada no como si hubiera eh electricidad pero era mejor que nada lucía pudo ver de nuevo a la otra pareja que se encontraba en aquella casa con ellos joaquín y bárbara estaban sentados en el sofá de enfrente de manera relajada y con la cabeza de él sobre el hombro de ella en un gesto cariñoso se suponía que sería una reunión entre amigos como muchas anteriores donde los tres hombres se reunirían para preparar alguna comida y ver el fútbol mientras las mujeres charlaban sobre sus cosas la vida el trabajo la maternidad de bárbara y lo típico que venía ocurriendo durante los últimos cinco años desde que lucía se había casado con antonio estas reuniones ocurrían una o dos veces al mes en la casa de alguna de las parejas pero en esta ocasión la naturaleza parecía querer arruinarles la velada la tormenta se llevó la electricidad y con ella el partido que todos se habían sentado a ver en la enorme pantalla ya que rogelio y lorena tenían en la sala ahora que la sala de aquella enorme casa se encontraba medio iluminada por las velas lucía no tenía ni idea de lo que harían no les quedaba más opción que esperar a que la lluvia amainara un poco claro podrían salir subirse al auto y marcharse a su casa pero ella prefería no hacerlo con la que estaba cayendo sería peligroso conducir y podrían tener un accidente sin embargo aunque no le gustaba esa posibilidad tampoco se sentía cómoda estando en la casa de alguien más por tantas horas eran amigos pero aun así ella estaba acostumbrada a dormir en su propia cama ya era tarde el agua no paraba de caer y poco a poco empezaba a creer que no les quedaría más remedio que pasar la noche ahí en casa de rogelio y lorena