Lo que ya está escrito. 2d2765

Yo no quiero hablar de ti quiero hablar de algunos días sueño contigo y me despierto entre el agradecimiento y la tristeza porque ni siquiera recuerdo que es lo que debería de sentir como se que sería lo correcto si a mí eso nunca se me dio bien y vuelvo una y otra vez a los parques a las calles a la puerta de las decenas de bares en las que nos peleamos y aunque tomado el sol las he paseado y he pedido otra ronda nada es lo mismo y es que nada nunca es lo mismo pero deberíamos dejar de escuchar canciones que antes escuchamos con otros deberíamos dejar de tararear el estribillo de nuestra canción favorita que portaba antes otras caras sería como pensar que la poesía sólo tiene los ojos los que pensaba vejer y que la primavera le pertenecía neruda esta noche envuelta entre el calor de junio que anuncia cambio por sábanas he pensado en medio del desveló en todas aquellas cosas por las que pasamos cuanto más se pueden hacer dos personas que no se quieren bien cuánto enseñan los errores habitar las mismas piedras como de tóxico puede llegar a ser algo que un día se llamo amor y que difíciles darnos cuenta y romper viejas costumbres y en esa melancolía sudorosa que empapada las tres de la madrugada es recordado la de veces que he dicho que atrás ni para coger impulso y que ahora empezado a odiar esa frase y a todos los que la pronuncian me da la sensación de que a menudo pensamos que lo que vivimos es pequeñito frente a las expectativas que ponemos en el futuro en lo que nos espera y no se trata de apegos feroces ni de querer revivirlo muerto pero a lo mejor las ilusiones nunca llegan a buen puerto lo único que nos pertenece ya está escrito