PepeFútbol#1636: La gloriosa previsibilidad del Barça (y el PSG) 4m4845

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Hola, ¿qué tal? Hoy estamos a jueves 10 de abril del año 2025. Os hablo desde el barrio de Arguelles, en Madrid, en España. Yo soy PP Rodríguez y este es el programa número 1636 de la sección de fútbol de PP Diario. Ese podcast que durante dos horas y cuarto, dos horas y media más o menos cada día, intenta traeros toda la actualidad del deporte en un sentido general, en un sentido global. Y aquí, en el primer tercio del programa, aquí en medio del espaciotiempo del universo conocido, vaya usted a saber, si no estamos también en medio del espaciotiempo de otros muchos y múltiples universos por conocer, vamos a charlar de fútbol.

De fútbol vamos a hablar. Ayer viendo la ida de cuartos de final de la Champions League, primero entre el Barça y el Borussia Dortmund, luego entre el PSG y el Aston Villa, me vino a la cabeza algo, bueno, me vino a la cabeza muchas, muchas ideas, pero algo que no sé si es común pensar, tampoco si es común a todos los años, si es todo bastante matizable, grisáceo, subjetivo y que nos gusta darle vueltas a cosas que en el fondo no tienen mucha importancia.

Y es que la Champions League, este año en concreto, está siendo dominada por los equipos que tiene que ser dominada y que rara vez esta competición a la que tendemos a llamar la competición de las sorpresas, en las que casi cada cual puede ganar, que en una eliminatoria puede pasar cualquier cosa, rara vez ocurre eso, muy rara vez. En todos los últimos años ha acabado ganando esta competición o el Madrid o el Manchester City o, bueno, equipos que desde luego están en la parrilla de salida como máximos favoritos a ganar la competición.

Y este año creo que hemos tenido una época en la que el Liverpool nos pareció a todos el mejor equipo de Europa, pero que hace tiempo que esa época pasó y no sólo en la eliminatoria frente al PSG sino ya desde antes, que en la Premier League tampoco están dando esa misma versión, esa misma cara y que el PSG venía en una dinámica y en un crecimiento que nos hacía parecer que en ese instante incluso el PSG podía ser favorito frente al Liverpool.

No fue un debate ni escaso, ni de escaso nivel, ni con escasos participantes que saben mucho de fútbol o que ven muchísimo fútbol, que te decían, yo desde luego también lo podía pensar, el PSG está para ganar al Liverpool. Puede ganar cualquiera de los dos, pero está para ganar al Liverpool. Y si te paras a analizar, por ejemplo, el rival de ayer del Barça, el Borussia Dortmund, jugó la final del año pasado y desde luego fue un accidente o fue algo insospechado.

No tienes que ser uno de los dos mejores equipos de Europa para jugar la final ni el mejor equipo de Europa para ganar la final, pero esto de que pasan muchas sorpresas, esto de que ocurren muchas cosas inesperadas, bueno, depende un poco de los sorteos, de los cuadros, de algún día en un rival que encaja bien con otro, en un jugador que es del primerísimo nivel que puede decir una eliminatoria, en un gol que no te esperas.

Los márgenes son pequeños, los equipos son casi todos buenos dentro de la perspectiva global del fútbol europeo y no se dan tantas sorpresas. No se dan tantas sorpresas y las cosas son bastante más lógicas de lo que parecen.

Ayer fueron de una lógica aplastante. De hecho, yo creo que lo mejor que tiene este Barça y lo que le hace el principal candidato a ganar la Champions, por supuestísimo, principal candidato a ganar la Liga y también a ganar la Copa del Rey, es que es extraordinariamente previsible. Qué pocas sorpresas.

Sí que dio sorpresas en noviembre y diciembre con las derrotas en Montjuic frente a rivales pequeños y a partidos en los que las cosas no salieron bien y a momentos de la temporada, por cierto momentos de la temporada que nada tienen que ver con el actual, en el que había jugadores dentro del once que ya no están y un once que ahora es completamente entendible de carrerilla, del uno al once con un par de cambios pero no muchos más.

Todos sabemos con qué once va a jugar el Barça los días grandes y el empaque y esa sensación de que ya no le generan las ocasiones que antaño le generaban, al menos no en el número, en la categoría. Así que es verdad que las ocasiones que le generan al Barça suelen ser todas muy claras, eso es verdad, pero ya no le generan el número que le generaban entonces y desde luego el control del partido ha ido creciendo a lo largo de la temporada y es un equipo que controla los partidos no sólo con el balón, no sólo con su torrente ofensivo, no sólo con su presencia en el área, sino casi con cualquier cualquier característica que define a un buen equipo. Lo vimos en Portugal, lo hemos visto desde la derrota frente al Atlético de Madrid en Montjuic el 21 de diciembre hasta hoy y lo estamos viendo en cada una de las iteraciones, cada una de las eliminatorias, cada uno