La Sirenita 5h5j7

Audiocuentos disney la sirenita seguro que todos habéis oído hablar alguna vez de las sirenas claro que si esos seres misteriosos y enigmáticos mitad mujer mitad pez que habitan en las profundidades del mar la mayoría de la gente no cree que existen seguramente porque nunca han visto alguna y no es extraño ya que solo en raras ocasiones se asoman a la superficie la historia que voy a contaros habla de una sirena que se llamaba ariel si una hermosa sirenita hija de tritón el rey del mar sucedió hace mucho mucho tiempo todo empezó como es lógico en el fondo del mar allí oculto a la vista de los seres humanos existía un maravilloso reino el rey tritón gobernaba con gran justicia y sabiduría aquel lugar y todas las criaturas marinas vivían en armonía unas con otras la vida en aquel pacífico reino era muy sencilla solo día dos grandes leyes que todos los súbditos sin excepción debían respetar una era mantenerse alejados de ursula la perversa hechicera del mar la otra no acercarse jamás a la superficie o adonde los humanos pudieran verles todos los habitantes de aquel reino submarino conocían muy bien estas dos leyes y todos las cumplían todos excepto la princesa ariel la hija más pequeña del rey tritón ariel soñaba con poder conocer el mundo de la superficie deseaba cambiar por un momento su preciosa aleta de escamas plateadas por unas bonitas piernas así podría caminar y conocer la vida en tierra firme sin que su padre lo supiera la sirenita solía asomarse para observar los barcos que iban y venían al verlos surcar las aguas la pequeña ariel soñaba con conocer aquel maravilloso mundo exterior la joven princesa guardaba en una cueva extraños objetos nos había encontrado en el interior de viejos barcos naufragados cuando se sentía especialmente triste ariel nadaba hasta su escondite y se pasaba las horas observando su colección continuamente se preguntaba para qué servirían todas aquellas cosas un día en que ariel estaba jugando con su amigo flounder un simpático pececillo de rayas azules y sonrisa bonachona la sirenita vio un bello navío que pasaba por encima de ellos ariel no pudo resistir el impulso y nadó hasta la superficie sebastian el cangrejo a quien el rey había encargado la vigilancia de la princesa lo seguía muy de cerca de pronto ariel asomó su linda cabecita y pudo ver el barco muy de cerca en aquel precioso galeón viajaba un joven muy especial el príncipe eric ariel le miró irada era un apuesto joven de aspecto muy agradable tocaba la flauta y bailaba alrededor de su perro max ariel los contemplaba embelesada aquella primera mirada bastó para que la sirenita se enamorará de un mal te había visto tan de cerca qué atractivo verde de pronto la música se interrumpió de golpe la mar se encrespó y se desencadena un terrible temporal el viento golpeaba con fuerza el galeón los marineros corrían despavoridos por la cubierta del buque solo el príncipe eric se mantenía valientemente en su sitio las gigantescas olas sacudían amenazadoras el enorme navío una y otra vez como si fuera una cáscara de nuez de pronto ariel vio como un golpe de mar lanzaba al agua al joven en la sirenita nadó y nadó hasta el el cuerpo del príncipe se había hundido ariel se sumergió y consiguió cogerlo por los brazos el príncipe había perdido el sentido y ariel lo llevó hasta la playa más cercana allí lo tumbo en la arena con la esperanza de que expulsara todo el agua que había tragado no pasaba nada parecía que el príncipe había muerto por fin gabriel notó algo mira este