Un rescate al límite 6w2o3

Las caras del mar nombres que salvan la vida y salvan la mar un podcast de salvamento marítimo hola hola hola buenos días grumete maite y bienvenida bueno bienvenidos todos a un nuevo episodio del podcast las caras del mar y a un nuevo año dos mil veinticinco ya o la capital lorente lo mismo digo que ya te echaba de menos que sabes que te quiero mucho por cierto carmen hasta cuándo se puede felicitar la navidad porque a estepa eso nos vamos ya a semana santa bueno la verdad es que no hay nada escrito así que yo creo que todavía estamos a tiempo y bueno no esperar mucho más pero todavía estamos a tiempo feliz año nuevo año nuevo vida nueva y sobretodo para nuestro protagonista de hoy año nuevo y vida nueva porque hoy aunque tendremos nuestras secciones habituales de noticias y el sollado vamos a escuchar un reportaje que seguro nos va a poner la piel de gallina una historia que emociona un rescate al límite de un padre surfista en aguas cercanas a barcelona víctor garcía de veintisiete años llegó a sentir que era el final y que el mundo se despedía de él así es su rescate se coordinó desde el centro de salvamento marítimo en barcelona y allí estaba otro joven y también casualmente de siete años nuestro controlador alonso méndez que forma parte de esta historia una parte muy importante sí pero nos lo vamos a contar nosotras os dejamos directamente con el relato de lo sucedido en este rescate con las voces de los propios protagonistas y narrado por nuestro compañero josé manuel al jarilla era sábado siete de diciembre el día estaba soleado y víctor garcía un joven de veintisiete años de barberá del vallés se animó a sacar su tabla de padel surf bueno yo este profesional de la salud también estudiaba almacenamiento deportiva el profesor de matemáticas física química y por otra parte llevo un programa de salud con pacientes que quieren mejorar su salud y me gusta mucho todo tipo de deportes al aire libre ya sea la naturaleza en la montaña en el mar a primera hora de la tarde víctor salió dispuesto a disfrutar de un bonito día de finales de otoño en la playa de barcelona las condiciones meteorológicas no eran las mejores pero tampoco parecía que pudieran complicarle su excursión acuática bueno la realidad querido salir de casa ya viendo que había un poco de viento y habiendo mirado internet letra óptico no pero pensé que bueno si era grave siempre podía al mar o volver a la previsión hablaba de bajas posibilidades de lluvia y temperaturas máximas de diecinueve grados con rachas de viento de hasta cincuenta kilómetros por hora al salir víctor cogió su móvil aunque algo escaso de batería además salí con poca batería por suerte pensé que voy tampico dar un momento para cargar el móvil durante el trayecto monólogo por suerte lo cogí y puede cargar el móvil un poquito más antes de llegar a playa no víctor llegó a barcelona alrededor de las cuatro de la tarde y escrutó el mar antes de entrar llegué a barcelona vi que el mar estaba un poco así así pero como había dos otras personas también practicando deportes en este caso deportes de de verano pues me atreví a meterme la costa con la tabla de padel entró con confianza como tantas veces con su tabla y su remo en la tabla en una bolsa estanca colocó su móvil víctor se encontraba genial llevaba un neopreno de verano y se lo bajó hasta la cintura porque tenía calor el cielo estaba ligeramente nublado pero el sol era el protagonista de la tarde el mar estaba en calma y pudo tomarse unas fotos sentado sobre su tabla en medio del ligero balanceo de las olas durante la primera mitad de mi de mi travesía no hubo ningún problema estaba bastante a gusto música y no creía lo que lo que iba a pasar a continuación fue entonces cuando el viento empezó a apretar con fuerza visto no se asustó porque las rachas duraban apenas veinte o treinta segundos y luego se iban pero el mar empezó a picarse y las horas balanceaban ya demasiado la tabla víctor pensó en aguantar el ataque de las olas y luego hacer echarse a la costa pero el viento no paró la corriente le empujaba mar adentro