Episodio 37 T3: «El ángulo del horror» de Cristina Fernández Cubas o cómo escribir sobre el paso a la madurez t6153

Ahora, cuando golpeaba la puerta por tercera vez, miraba por el ojo de la cerradura sin alcanzar a ver o paseaba enfurruñada por la azotea, Julia se daba cuenta de que debía haber actuado días atrás, desde el mismo momento en que descubrió que su hermano le ocultaba un secreto, antes de que la familia tomara cartas en el asunto y estableciera un cerco de interrogatorios y amonestaciones, porque Carlos seguía ahí, encerrado con llave en una habitación oscura, fingiendo hallarse ligeramente indispuesto, abandonando la soledad de la guardilla tan solo para comer, siempre a disgusto, oculto tras unas opacas gafas de sol, refugiándose en un silencio exasperante e insólito.

Bienvenidos a nuestra mesa de disección, cojan guantes y escarpelo y prepárense para abrir la ficción de hoy en canal, esto es...

Ficciópatas. Buenas a los dos, hoy estamos en el episodio número 37, 1 de junio de 2025, así que nada, hoy y además es el último programa con nosotros de Cris Tenaz, ya se acaba la temporada, se acaba Ficciópatas. Bueno, yo digo por el momento. Por el momento, sí. Siempre se puede hacer un reunion, como está muy de mola esto de reunirse tiempo después, o sea que nunca se sabe, pero bueno, de momento pues se cierra un ciclo, se cierra una etapa y bueno, aquí pues estamos despidiendo a Cris.

Antes de avanzar voy a felicitar a mis perritas que hoy cumplen años y a José Antonio Castro Cedrian, mi buen amigo, que también es su cumpleaños hoy, así que ya con esto ya podemos... Tenemos la sección de efemérides de Ficciópatas.

Ya no va a haber más del año que viene, pues todo ya aprovecho. Bueno, yo lo iba a decir al final, pero decir que Cristina ha sido un placer trabajar contigo, que la verdad que han sido tres años al final y quieras que no, pues ha sido un placer tenerte por aquí y todas las lecturas que nos has inducido a leer y analizar, todo muy interesante. Gracias por todo.

Yo también muchas gracias Cris por tu participación, por tu, como dice Eric, por tus recomendaciones, que han sido un descubrimiento. Nos han encantado todas y bueno, creo que gracias por participar en este programa, en Ficciópatas y eres parte de la familia.

Gracias a vosotros por acogerme, invitarme y por retroalimentar, porque eso es para lo que hacemos estas cosas. Yo puedo ver algunas cosas, pero vosotros tenéis puntos de vista diferentes y creo que eso es lo que enriquece cualquier cosa. En este caso la literatura y una lectura en común, pero en general en cualquier debate el enriquecimiento es el aprendizaje del otro y el punto de vista del otro y contad conmigo si os arrepentís.

¡Arrepentíos insensatos! No obstante, ya sabes que estás invitada a cuando pases por Murcia, a que nos veamos.

A un matrimonio, ¿no? A un trimonio.

No, lo decía por la tapa esta.

Ah, el matrimonio.

Bueno, a una...

A ver, es que la hora que es...

No te había entendido.

Ya me entra hambre.

Sí, sí, sí.

Bueno, pues nada, ¿qué nos traes hoy? Vamos a dejar esto a un lado.

Digo, exacto. Hoy os traigo el ángulo del horror de Cristina Fernández Cubas o cómo escribir sobre el paso a la madurez.

Esto es lo que he querido yo dar como interpretación y ya luego os explicaré, como siempre, por qué.

Cristina Fernández Cubas es una de las autoras que hemos traído hasta ahora con más producción o que empezó antes.

Ya sus últimos libros datan de 2013 o algo así.

No os diré mucho, simplemente quizás Víctor quiera completar, pues que en este caso el ángulo del horror le da el mismo nombre a la antología de relatos publicada por Tusquets.