EL MEDIO NO ES EL FIN (ECONOMÍA Y HUMANISMO) m4m5q

Bienvenidos a Primum Gradus, tu podcast de historia y humanidades en general.

Os habla Ricardo Silvestre y pronto, sobre todo, nos hablará Fernando Cañas, que nos va a hablar de un tema muy interesante sobre la crisis, pero no la crisis económica, sino una crisis humana, que lleva como consecuencia una crisis económica, pero mejor nos lo dice él.

¿Qué tal, Fernando? Muy bien, Ricardo, ¿y tú? Muy bien. Hemos estado media hora larga en el previo, en el Off the Record, que lo publicaremos por separado, y ahora ya toca empezar el programa y no sé si te ha gustado la presentación que he hecho del tema.

Me ha encantado la presentación, porque parece que vamos a hablar de economía, de límites de productividad del CIP, de estímulos económicos, de sobreproducción de ropa, pero en realidad, que es curioso, se acerca a la Cuarta Revolución Industrial, hay teóricos, ¿te acuerdas del libro que pasé por el grupo de Primum Gradus de Klaus Schwab? No me lo he leído, todavía.

No hay por dónde pillarlo.

Klaus Schwab no está en mi lista de grandes hombres, pero bueno.

Hay que saber lo que piensa.

Ahí vuelca sus teorías económicas y habla de esto que vamos a hablar, de cómo la Cuarta Revolución Industrial va a destruir muchísimo tejido productivo.

De hecho, todo su libro es control y renta universal, porque si no, no hay quien compre los productos, porque se está descapitalizando al trabajador promedio, su capacidad de consumo está desapareciendo.

Renta universal es que te da una paguita por existir.

Sí, que va asociada al postcapitalismo y a la era de la superabundancia.

Este sujeto piensa que hay una gran parte de la población que no es productiva ni va a serla, que no es insertable, que no es económicamente viable insertarla, y que aparte no es necesaria.

Pero como matarlo sería feo, lo único que hay que hacer es orillarlos para que desaparezcan solos.

Perdona, esto es absolutamente improvisado, pero me recuerda mucho a Yuval Noah Harari, que al principio era muy descarado hablando de estas cosas, ahora se ha moderado porque alguien ha dicho, oye tío, no seas tan descarado.

Pero sobre todo hay una cosa interesante, el trabajo solo lo vende como un producto, pero el trabajo es algo más.

Quiero decir, mi trabajo no solo es lo que me hace ganar la vida, es lo que da sentido, no todo lo que da sentido a mi vida, pero si yo no trabajase, si yo no hiciese nada productivo...

Claro, pero es que el trabajo también tiene un rol social.

¿Por eso? Porque tu trabajo determina qué puesto tienes en la sociedad, cómo te has desarrollado a nivel académico, formativo, qué baje tienes, qué competencia profesional...

¿Forma parte de tu ser? Quiero decir, cuando una persona te presenta, hola, soy Fornito, ¿a qué te dedicas? Es que te conformas como persona.

Ya te digo que en los datos que traigo, el 38% de la población global no tiene actividad económica de ningún tipo integrado en las cadenas de producción globales.

El 38% de la fuerza laboral hoy en día no consigue producir ni en servicios, ni en industria, ni en agricultura.

Hoy en día, antes de la Cuarta Revolución Industrial, el 38% de esas personas no tienen esa identidad, no han llegado a capitalizarse como para poder tener un rol económico-social.

Pues son gente vencida, entonces.

Gente que su vida es un mero existir.

Pues sí, y aparte con unas situaciones bastante fuertes.

Claro, en esa situación de no poder insertarse, la situación es casi como de vagar en un fantasma, porque las perspectivas son cero, las perspectivas económicas...

Y aquí venimos con la gracia que me hace.

Hace mucho tiempo que quiero traer a Primum Gradus un concepto que dan varios filósofos de estos absurdos, que es la era de la superabundancia.

Ellos dicen que sí, hay un 38% de la población que va a llegar al 50% o al 70%, pero que no va a haber problema, porque vamos a llegar a la era de la superabundancia.

¿Qué es la era de la superabundancia? Es una etapa del desarrollo económico y tecnológico que se caracterizará por la disponibilidad prácticamente ilimitada de bienes y servicios.

Oye, ¿esto sabe a qué me recuerda? A cada uno según sus capacidades y a cada uno según sus necesidades.

Es decir, Max Hilbert...