MUERTE EN LA VICARÍA de Agatha Christie (capítulos: 14, 15 y 16) | Audiolibro 1n5x2h

Capítulo catorce al dirigirme a casa me encontré con mis carnes que me entretuvo unos diez minutos quejándose con su voz profunda de la ingratitud de las clases inferiores parece que los pobres no querían games carnes en sus casas y mi simpatía se estaban completamente de parte de ellos mi posición social me impide a expresar mis sentimientos con la misma franqueza que ellos la calma lo mejor que pude y me dirigía apresuradamente a la vicaría leído me alcanzaba en su coche junto a la esquina acabas de llevar a mis tres prefiero a su casa dijo al pasar me espera frente a su casa entre un momento me invitó accedí es un asunto extraordinario observó mientras arrojaba el sombrero sobre una silla y abría la puerta del consultorio se dejó caer en un desgarrado sillón de cuero parecía preocupado le informe que habíamos podido fijar la hora del disparo me escuchaba con aire has traído eso deja libre de sospechas sadam prefiero exclamó me alegro de que no se trate de ninguna de nuestras mesas simpáticos creía sus palabras pero no pude menos que preguntarme por que si como decía sentía simpatía por ellos el hecho de que estuvieran libre este sospechas parecía asumir le en un estado de abatimiento por la mañana había tenido las plaquetas de un hombre a quien le hubieran quitado un peso de encima pero en aquel momento me pareció preocupado sin embargo estaba convencido de la veracidad de sus palabras sentía realmente simpatía por han producido y lorenza ring por qué pues aquella melancolía quiero hablarles deja wish dijo haciendo un esfuerzo todos estos sucesos lean medio enloquecido está realmente enferma no hay un mal radical en el desde luego supongo que debe usted saber que ha aparecido encefalitis letargo ficha la enfermedad del sueño como comúnmente se le llama a repulsa con gran sorpresa no sabía nada nunca lo mencionado cuando tuvo esa enfermedad hace cosa de un año se repuso es decir en el grado en el que algunos de los que sufren logran reponerse entonces una extraña enfermedad que produce un raro efecto moral el carácter del enfermo puede cambiar completamente permanecido en silencio durante un momento nos entristece cuando pensamos en los tiempos en que quema vamos a las brujas en la hoguera creo que llegará el día en que la humanidad se realizará al pensar que ahora vamos a los criminales prosiguió no es usted partidaria de la pena de muerte no es eso exactamente repuso e hizo una pausa luego hablo lentamente prefiere mi trabajo al suyo por qué porque al suyo trata extensamente acerca de lo que llamamos bien y mal y no estoy muy seguro de que tales cosas sexta suponga que todos ello no sea sino una cuestión de secreción glándulas una glándula demasiado grande y otras demasiado pequeña y quizá este simple hecho pero te busca el asesino el ladrón el criminal empezar mido clima en creo que llegara el tiempo en que realizaremos al pensar los siglos que hemos dedicado a lo que acaso pueda llamar se reproducción moral y quejemos matado agentes que sufren enfermedades contra las que no se puede hacer nada no se ahorca un hombre por el solo hecho de padecer tuberculosis no es peligroso para la sociedad en cierto sentido se contagia a otra gente tome desgraciado que se cree emperador de no se le considera malo por este sencillo hecho sea lo que se refiere cuando se habla de la sociedad de ser protegida el cierre de esa gente tan de no puedan causar daño alguno elimina los en forma de misericordioso yo llegaría hasta ahí pero no llame castigo a eso nada caer la vergüenza sobre esos desgracia claros y sus familias le mire con curiosidad nunca le había oído hablar así no acostumbro a exponer mis teorías hoy hago una excepción ustedes persona inteligente crimen no trazas los clérigos lo son itirá me parece que no exista aquello que técnicamente es conocido como pecado a pesar de lo cual está dispuesto a considerar la posibilidad de tal cosa va contra la misma raíz de nuestras ideas repuso si formamos parte de una humanidad de mente estrecha y que cree ser buena ansiosa de juzgar a aquellas cosas acerca de las cuales nada sabe yo creo sinceramente que el crimen ya es distinto y que debe ser tratado por el médico gina para el policía sacerdote quizás en un futuro ya no existiera lo esperan cuidado ustedes si es un pensamiento magnífico estudiar