[Yoga Nida]: 30 minutos para liberar estrés y dormir mejor 32k22

Hola, soy Natha y me alegro mucho darte la bienvenida a esta práctica de Yoganidra aquí conmigo en pausa con Natha. Durante los próximos 30 minutos te invito a descansar, hacer una pausa y a nutrirte profundamente.

Si has estado sintiendo cansancio, desgaste o simplemente necesitas un momento de silencio, este espacio está aquí para ti. Quiero que sepas que al finalizar nuestra práctica no habrá ninguna guía para volver a desvelarse. Si necesitas continuar con tus actividades después, te animo a tomar una pausa y programar un recordatorio suave para ayudarte a regresar con calma. Comencemos encontrando una posición cómoda, recostado o recostada.

Tomándote el tiempo que necesites para acomodarte. Tal vez quieras cubrirte los ojos, si eso te ayuda a sentir mayor comodidad. Quizás preferís colocar almohadas debajo de las rodillas o la cabeza. También puedes cubrirte con una manta o algo abrigado, ya que al relajarte es posible que tu temperatura corporal se baje. Permite que las piernas caigan de manera natural. Deja que los pies se relajen y giren ligeramente hacia afuera.

Descansa los brazos a tu lado, con las palmas hacia arriba o suavemente hacia adentro, dejando los dedos sueltos. Cierra los ojos y siente como el cuerpo se entrega a esta postura de descanso. Este es tu momento, un tiempo para descansar, para recibir, para dejarte sostener por la tierra que te apoya. Permítete disfrutar de este regalo, donde necesitas estar. Nada más que debes hacer, solo deja que mi voz te acompañe.

Si en algún momento te duermes o no escuchas alguna palabra, está bien.

No hay una manera correcta ni incorrecta de vivir esta práctica. Simplemente permite que todo lo que surja está bienvenido. Ahora, si el cuerpo necesita algún ajuste final, hazlo ahora y luego invita a la quietud. Repite internamente si te ayuda.

Permaneceré en quietud hasta el final. Lleva ahora la atención a la respiración y comienza a tomar respiraciones largas, lentas, profundas y completas, inhalando hacia el abdomen, expandiendo el pecho, pausa por un instante y soltando el aire con una exhalación larga y lenta por la boca. Cuando exhalas, siente como cada parte del cuerpo se relaja aún más.